La
novela cuenta una doble historia. Por una parte la veneración de Cecilia por su
MADRE y por otra la narración de la vida
de Silvio que, a sus 88 años mantiene las neuronas en su sitio y la mente
despierta gracias a una caja de fotografías. El anciano cuenta su vida que
podemos calificar de novelesca. Sus familiares creen que ha pasado por este
mundo sin pena ni gloria, tremenda desilusión, la realidad es bien distinta.
El
libro es prodigioso, lo leí en su día. La lectura te llena, es realmente bueno.
Según los lectores es recomendable. Fue finalista del premio Planeta 2006 y no
me explico cómo no obtuvo el primer premio. Habrá que leer al ganador: LA
FORTUNA DE MATILDA de Álvaro Pombo, aunque después de informarme del demoledor
comentario de los lectores, he desistido.
Abelardo, con Los Premios Planeta suele ocurrir eso. El premio se le da al de más fama y el finalista al de más calidad. Es una forma de marketin. Según el tipo de lector que seas te inclinas por uno o por otro o por los dos.
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