Viktor
Palmgren es un magnate sueco que a lo largo de su vida ha adquirido numerosos
enemigos. Durante una cena en el hotel Savoy recibe un disparo ante los ojos
atónitos de los comensales que ven como el asesino huye en una bicicleta.
Todos los
testimonios se revelan incapaces de esclarecer el crimen. En su investigación el jefe de la brigada de Homicidios de
Estocolmo Martín Beck, se encargara de descubrir quién de los innumerables
sospechosos ha decidido tomarse la justicia por su mano. Junto con Beck
intervienen una galería de personajes como Larson, Kolberg y Masson, dando la
imagen del trabajo policial bien hecho como tarea colectiva y metódica.
Durante la
lectura, las pistas tardan en aparecer. Después del asesinato y habiendo leído más de cien páginas, no sucede prácticamente
nada. La investigación permanece completamente estancada. Al final, ¡Cómo no!; terminará por aclararse el crimen.
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