El libro que contiene más de 600 pág. lo tenía en mitad de la lectura cuando viajé a Peñíscola para pasar unos días. No se lo merecía pero lo llevé también de viaje. Lo bueno es que lo terminé de leer y lo malo es que era muy voluminoso. A pesar de las tablet y demás dispositivos, había en el hotel lectores con sus libros en papel. Lo que es cierto es, que nadie tenía un lápiz o bolígrafo para hacer alguna anotación.
Una emocionante novela de intriga y espías que Pérez Domínguez traslada al Madrid y Sevilla de los años cincuenta con total naturalidad.
Erica Walter huye a Madrid con un legado de documentos que su marido le había entregado para que los conservara; su amante Martín Navarro se ve obligado a abandonar París para reunirse con ella. Sabe que en España le espera la cárcel o la muerte. No obstante lo arriesga todo para reunirse con Erika. Con la policía, los nazis, los comunistas y la CIA detrás de ellos, ambos amantes se verán envueltos en una trama de espionaje e intereses ocultos. Una novela que refleja que a pesar de la intolerancia y el fanatismo político, hay cabida para el amor y la amistad.
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