Fórmula ideal para leer este libro en un día.
Subir a una ambulancia. Tu madre en la camilla. Tú de copiloto. Tu madre a urgencias. Tú a esperar.
Leer los dos primeros capítulos en los que se presenta la trama. Coinciden dos finlandeses en un granero, ambos para ejecutar su propio método de finalizar con sus vidas. Te recuestas un poco en el sillón de la sala y lees dos capítulos más. Dado el número de suicidios en Finlandia deciden poner un anuncio en el periódico y hacer una reunión de posibles candidatos con quienes contesten. En la tele “24horas” informa sobre las investigaciones en torno al descarrilamiento del tren en Santiago y sobre el debut de Neimar en el FC Barcelona. Seguir avanzando en la lectura. Nuevamente, y así cada media hora se repite el bloque de noticias. Seguir leyendo. De las contestaciones recibidas unos veinte incondicionales se embarcan en una guagua para buscar el lugar ideal por donde despeñarse. Cambia de asiento, estira la espalda, no hace falta que mires la tele: a estas alturas Neimar ha debutado seis veces más. El viaje les lleva por todo el país. El sueño amenaza. Son las cuatro de la madrugada y sin darte cuenta a las siete despiertas con la guagua camino de Alemania y Suiza. A las siete y media anuncian el nombre de tu madre por megafonía y acudes a recibir la información: el cuadro clínico también viaja, por los mismos países europeos a lomos de las empresas farmacéuticas productoras de antibióticos, hacia la mejoría. Seguir leyendo esta disparatada aventura que cruza España hacia Portugal, valorando su mejoría según van quedando menos páginas, al tiempo que ofrece anécdotas divertidas y un buen retrato de la sociedad finesa. A las doce y media nueva llamada. Un solo familiar por enfermo. Ella, siguiendo la trama, se conduce hacia la vida. Ya en planta la peor parte del trago ha pasado y al igual ocurre con los deliciosos protagonistas. Las urgencias de la señora de la guadaña se disipan al borde de un acantilado.
Muy buena pinta..... a esa señora de la guadaña ssiempre hay que obligarla a esperar....
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