La Tribuna es Amparo, hija
de vendedor de barquillas que confecciona en casa y de madre paralítica. Ayuda
al padre en la confección y venta de tan dulce manjar hasta que decide mejorar.
Para ello accede a la fábrica de cigarrillos gracias a una recomendación de
gente de bien que la conoce por su belleza. Pronto entra en conflicto socio
laboral y de amores convirtiéndose en fiel defensora de los derechos laborales
y de la mujer ante la llegada de la Primera República.
No es de extrañar que doña
Emilia Pardo Bazán esté en alza no solo como escritora sino como adelantada a
su tiempo.