Abordé este libro sin saber que era un "indispensable" de la literatura universal. Interesante porque cada vez me gusta más disfrutar de las expresiones artísticas sin ningún tipo de expectativas. Me llamó la atención que buena parte del libro es el propio diálogo interno del personaje principal, denso y atormentado, que se debate entre los "debe ser" sociales y su zozobra personal en la búsqueda de una razón de vida. Hay un concepto recurrente que debilita las energías del personaje, la falsedad social. La mirada del personaje sobre la sociedad americana es desalentadora.
Las vacaciones de verano son ideales para el tiempo que demanda la narrativa: tener un par de horas mínimas para sumergirse en el universo que tenemos delante. Recomendable para leer y después buscar otros estímulos más optimistas.
Lo leí hace mucho tiempo, tanto que ya no recordaba el argumento. Me acuerdo de una sensación de frustración y desánimo, debido al pesimismo que desprendía la novela.
ResponderEliminarMe leí este libro, creo que fue el verano pasado, con una gran curiosidad. Es un "libro de culto" para los norteamericanos. No lo entiendo, es mi opinión personal, pero no me gustó nada.
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